Hygge, el secreto danés
Más que una tendencia decorativa, es una filosofía de vida. Hoy en Pinturas Lepanto os descubrimos un nuevo estilo de decoración que llega desde Dinamarca para sorprendernos y hacernos la vida más feliz.
Contemplar la vida con un chocolate caliente, leer un buen libro mientras el fuego en la chimenea quema la leña. Esta podría ser perfectamente la definición de Hygge, el nuevo concepto que llega desde tierras danesas para recrear atmósferas acogedoras, confortables, íntimas y relajantes. Hablamos de una estética cercana al minimalismo donde la comodidad y sencillez tienen prioridad.
Se pronuncia hu-ga pero no tiene traducción. Sin embargo, vendría a ser el equivalente a “lo acogedor”, “lo amable”, “lo cálido” o “lo familiar”, es decir, todo aquello que nos hace feliz o nos hace sentirnos bien. Hoy en Pinturas Lepanto os trasladamos a Dinamarca a través de la pintura y la decoración. Os contamos los 6 pasos claves para aplicar el hygge en tu hogar.
Ambientes puros y sencillos. La primera clave de todo es tener en mente que el estilo Hygge crea espacios tranquilos y libres de desorden. Por ello, debemos tener en cuenta que la decoración tenderá a ser monocromática.
El confort es la base del hygge. Las alfombras, sofás, sillones o cojines deben proporcionar una sensación de comodidad y para ello, sus diseños deben evitar los estampados llamativos o artificiales. Los materiales más utilizados son el algodón, la lana y el lino.
Alusión a la naturaleza. En las decoraciones danesas se recurre a menudo a reciclar o a utilizar elementos relacionados con la naturaleza. Por ejemplo, la madera suele ser el elemento principal para el mobiliario dado su origen vegetal y la calidez que aporta al ambiente.
Aprovechar al máximo la luz solar. Recuerda que este término procede de los países nórdicos, una zona geográfica cuya climatología ofrece pocas horas de luz natural. Hay que eliminar todo tipo de adorno que entorpezca o reste iluminación al ambiente. Es común ver, por tanto, amplios ventanales y cortinas con materiales translúcidos.
Colores suaves y mayor ligereza. Simplicidad, serenidad y confort; los hogares Hygge se caracterizan por ser espacios acogedores y cálidos. En este proceso, la pintura juega un papel muy importante. Por ello los colores más utilizados son el blanco y toda la gama de tonalidades neutras. El marrón o el beige también aclaran y consiguen dar mayor sensación de amplitud. Hace un par de días os presentábamos nuestra nueva carta Ecotendencias, una amplia propuesta de 10 colores versátiles que marcarán tendencia en decoración este 2017 y que mucho tienen que ver con el concepto Hygge.
- El Alabastro es un color con mucha influencia nórdica. Precisamente por eso, es perfecto para crear un ambiente Hygee, ya que da cabida a la imaginación y a la estimulación de espacios limpios que invitan a respirar una atmósfera llena de paz. Se empareja muy bien con estilos e influencias de decoración escandinava, donde el blanco, el gris y el beige son populares. Para darle un toque de luz, frescor y vegetación, se complementa a la perfección con el tono Verde Luz.
- En nuestra gama de tonos cálidos, el Espinela y Cuarzo Ahumado ofrecen ligereza cromática. Aunque en diferentes intensidades, ambos son tonos cálidos y pasteles muy ligeros que se prestan a multitud de combinaciones. Por ejemplo, con colores como Niebla o Gris Iolita.
Sobre todo, es importante prescindir de elementos decorativos que recarguen la estancia. Asimismo, es preferible evitar el papel de pared y los techos con estampados.
Velas y flores naturales. De día las flores, los pétalos, ramas o plantas ofrecen un encanto especial y singular al espacio y quedan bien en cualquier zona de la vivienda. Aportan esa sensación de naturaleza y paz. Por la noche, el brillo cálido de una vela blanca y sin perfume le da ese toque personal, íntimo y relajante que tanto caracteriza a este estilo.
¿Te animas a disfrutar de este estilo de vida?
Fuente imágenes: El país de Sarah